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La base de toda iluminación es la luz. La naturaleza nos da un foco de luz utilizable que es el sol, pero esta no es suficiente, ya que nuestra vida social se desarrolla también en lugares y durante horas en las que, el sol, desaparece, siendo necesario valernos de sistemas de luz artificial

En las nuevas autopistas, avenidas, plazas y parques, entre otros espacios públicos, la luz, tanto natural como artificial, la podemos vincular cada día más a la creación de confort, seguridad y mejora estética de los espacios que habitamos, alejándolos de la oscuridad y permitiendo que las actividades se amplíen, y con ello, la calidad de vida mejore, debido a que gran parte del día se esta trabajando en lugares cerrados en los que es necesaria la luz artificial y el otro resto del día nos desenvolvemos en espacios comunitario cuando ya no contamos con luz natural, de esta forma la necesidad de desarrollar iluminación para realizar diferentes actividades es parte fundamental de la vida. Por este motivo es destacable que existe una mayor identificación de que es posible utilizar este valioso elemento virtual que es la luz como parte importante del diario vivir. De esta forma podemos notar que las necesidades mas comunes en torno a la iluminación de ambientes tiene que ver con la generación de seguridad, la comodidad que uno puede sentir en un lugar determinado y la decoración del ambiente.